El video de la caída de Sergio Denis, similar al que sufrió Sabina

Sergio Denis, el popular cantante que logró cosechar una exitosa trayectoria artística, murió a los 71 años en la mañana de este viernes 15 de mayo. La triste noticia la confirmó su hijo, Federico Hoffmann, a través de las redes sociales. Durante 14 meses estuvo internado, pero no pudo recuperarse de las graves lesiones que había sufrido en un accidente ocurrido en el Teatro Mercedes Sosa, de Tucumán.

El 11 de marzo de 2019, el artista se presentó como tantas otras noches en el teatro tucumano para ofrecer un recital frente a sus fieles seguidoras. Durante el show, el músico interpretaba uno de sus hits, “Te llamo para despedirme”. En un momento, bajó del escenario para caminar entre el público. Al regresar, subió unas escaleras, caminó por una angosta pasarela y cayó unos tres metros desde el escenario al foso de orquesta del teatro.

Las espectadoras gritaron al ver a su ídolo desaparecer. La música siguió por unos minutos más. Algunas personas se pararon de sus asientos y se quedaron sorprendidas al ver que el artista se encontraba en el piso, sin reaccionar. Todos temieron por la salud de Sergio que rápidamente fue auxiliado por sus compañeros. Nadie imaginaba que ese sería el último recital de su carrera.

En grave estado, Denis fue trasladado de urgencia en ambulancia al Hospital Público Ángel C. Padilla, donde le hicieron todo tipo de estudios para salvarle la vida. La directora del Hospital, Olga Fernández, explicó que el cantante presentaba “hematomas cerebrales, múltiples contusiones, una hemorragia, un importante edema cerebral, una fractura del hueso temporal en la cabeza y una fractura al nivel de la clavícula y el omóplato”.

Con el paso de los días, el intérprete fue evolucionando favorablemente. Permaneció en la unidad de terapia intensiva del hospital tucumano hasta el 13 de abril de 2019, cuando fue trasladado a la Ciudad de Buenos Aires para continuar con un tratamiento médico en el Sanatorio Los Arcos de Palermo. De esta manera, su familia también podía estar más cerca de él. El 7 de mayo de 2019 lo llevaron a la Clínica Alcla, especializada en rehabilitación neurológica. Allí estuvo internado durante largos meses, pero jamás se despertó y en la mañana de este viernes murió a los 71 años.

Este accidente que puso fin a la vida del popular artista generó una gran preocupación en los dueños de teatros y directivos que manejan este tipo de espacios culturales. Meses antes de este episodio, Raúl Armisén, administrador del Teatro Mercedes Sosa, había pedido realizar la obra para tapar el espacio ya que “desde hacía tiempo que no se usaba”.

Desde el 2018, la idea del encargado del lugar era poner una madera entre el escenario y la platea, que cumpliera una función: tapar el foso de orquesta (el espacio generalmente frente del escenario, bajo nivel en el que se disponen los músicos, usualmente ubicados de espaldas al público) y ampliar el escenario. Por ser un teatro estatal, debió pedir autorización a la Municipalidad y estos trámites burocráticos y administrativos suelen tardar mucho tiempo.

Finalmente, se pudo realizar la obra a mediados de 2019. “La fosa esta cerrada con una estructura desarmable, tal cual estaba previsto”, confirmó en octubre pasado el administrador del teatro a Teleshow. Aunque la estructura es removible, la mayoría de los artistas eligen mantenerla durante sus shows. La modificación no solo es una tranquilidad para los actores o músicos que se presentan ene el lugar, sino también para el público, ya que solo una baranda dividía el hueco del foso de la primera fila de butacas del auditorio.

Un accidente similar le ocurrió a Joaquín Sabina, quien sufrió una fuerte caída el pasado 12 de febrero mientras estaba dando un concierto con Joan Manuel Serrat en el Wizink Center, en Madrid. El artista de 71 años se cayó unos dos metros del escenario y fue retirado del lugar en camilla. Antes de ser hospitalizado, apareció en una silla de ruedas empujado por Serrat y explicó que el concierto sería cancelado.

Estuvo once días en el Hospital Ruber Internacional de Madrid, donde le diagnosticaron “traumatismo de hombro izquierdo, torácico y craneoencefálico”. En una entrevista radial con Beto Casella, Serrat habló del delicado cuadro de su colega: “Joaquín se pegó un porrazo terrible que le provocó un derrame en la cabeza del cual tuvo que ser intervenido en un par de ocasiones y tuvo una fractura triple en el hombro”. Finalmente, el 23 de febrero recibió el alta médica.

En plena cuarentena, el artista dio una entrevista desde su casa y recordó el accidente: “Yo creo que cometí un error, pero Serrat dice que no, que fue una cosa muy rara. Yo llevo casi 40 años en esto, siempre antes de salir al escenario pienso que eso puede suceder, y siempre estoy atento. Debí cometer algún error, sé que me enrolle en un cable y que el siguiente paso me pegué un hostión, el hostión fue más fuerte de lo que pensáis, ando con dos operaciones, una aquí (se señala el brazo), tengo hasta titanio y otra de un hematoma en la cabeza”.

A diferencia de Sergio Denis, Sabina sí se pudo recuperar. Seguramente espera con muchas ansias poder volver a los escenarios cuando levanten la cuarentena y permitan realizar recitales con público presente.

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