"La falta de apego primario a la madre puede tener consecuencias"

De Rosa explicó a Sudamericana que “hay que tener en claro que hay muchas formas de desprotección de los niños”, aludiendo a filicidios cometidos en muchos casos por las propias madres, violaciones, agresiones y otros hechos. Afirmó en el caso de Luis Nazareno que por su edad “quizás no recuerda los hechos cronológicos puntuales porque la mente no está preparada, pero los seres humanos nos comportamos por apego primario, que es lo que el bebé siente cuando por instinto se asoma al pecho de la madre para alimentarse y la ausencia de ese apego nos da inseguridad y tiene consecuencias”.

Reconoció que “el instinto materno o altruismo existe porque hay gente que lo ejerce”, agregando que “como especie, en los mamíferos existe la protección de la hembra a sus crías”. Sin embargo, también indicó que “hay algunas madres que no lo ejercen o no lo pudieron estructurar en su psicología, por lo que aparecen muchos casos de filicidio, abandono, etcétera”. Recalcó que “hay casos en los que las madres ponen en peligro su propia vida por la de sus hijos, pero si importa más lo propio que el otro, la historia es otra”.

El experto manifestó que “los lemas o aforismos muchos no sirven en una sociedad absolutamente fracturada como la nuestra”, respecto de dichos que hablan del amor incondicional maternal o paternal.  En cuanto a la posibilidad de condena por abandono o incluso de que se agrave la imputación, que solicitó la fiscal, el psiquiatra dijo que “el castigo sirve para el aspecto vindicativo de la ley, pero a nivel social no sirve porque esta persona no va a aprender porque hay estructuras psíquicas que se le impiden”.

Por ello, expuso la necesidad de “dejar de lado los viejos esquemas judiciales y pensar cómo reinsertar a esta gente”. En cuanto a padres adoptivos, recordó que “parte de entender desde la perspectiva legal es como ver desde la cerradura lo que pasa en una habitación”. Explicó que “los vínculos paternales son casi primariamente culturales porque el cerebro se reformula y uno aprende a amar a aquel que le dio protección, por lo que el hecho de que la justicia rompa ese vínculo es desastroso”.

Dijo que “hay que entender que los vínculos se trabajan día a día y si no se acepta esa hermosa carga de ser padre, no se entendió de que se trata”.