La ONU puso fin a su misión de paz de 15 años en Haití

Las Naciones Unidas puso fin este martes a una misión de paz de quince años en Haití, pese a la convulsión en la que está hundida el país caribeño por la violencia de las protestas que exigen la renuncia del presidente Jovenel Moise.

La ONU cerró esta etapa bajo la promesa de que no abandonará la isla, debido a que la misión de paz será reemplazada por otra de carácter político.

El organismo internacional instaló la comisión en 2004, una operación que fue sucedida en 2017 y cuya vigencia terminó dos años más tarde después de haber sido extendida seis meses en abril.

De todas maneras, la salida de la ONU se concreta en momentos en que Haití entra en su quinta semana de protestas contra la figura del presidente Moise, quien desde marzo pasado no puede formar un gobierno efectivo por los constantes bloqueos del parlamento.

Muchas de esas protestas derivaron en saqueos, otros actos vandálicos y muertes en medio de la hambruna, la falta de combustibles, la corrupción y la inseguridad en la que se desenvuelve unos los países más pobres del mundo.

La ONU "cierra la página del mantenimiento de la paz pero no concluye su apoyo a la nación caribeña”, aseguró ante el Consejo de Seguridad el secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios de la ONU, Mark Lowcock.

El funcionario destacó los progresos que el mantenimiento de la paz llevó a Haití en quince años, entre los cuales mencionó el despliegue de la policía nacional, que dio lugar a importantes cambios sobre el terreno como la disminución casi a la mitad de la tasa de homicidios entre 2004 y 2019.

“Sin embargo, estos logros no ocultan el hecho de que Haití sigue necesitando el apoyo de la comunidad internacional y de las Naciones Unidas. Si bien el mantenimiento de la paz en Haití ha creado un entorno propicio para que se lleven a cabo los procesos políticos y democráticos, es necesario encontrar más soluciones políticas a los problemas políticos sistémicos”, advirtió.

Lowcock alertó además sobre el impacto en la situación de seguridad que está teniendo la crisis, con una estimación inicial de 30 muertos en las protestas entre el 15 de septiembre y el 9 de octubre, la mitad de ellos agentes de Policía.

"En este contexto difícil, el cierre de la misión no supone una salida de las Naciones Unidas de Haití. Al contrario, llevará a continuar el apoyo de la ONU de otra forma", recalcó.